– ¿Qué consejos básicos daría a los padres y madres?
– Que pongan el ordenador en un espacio común de la casa en vez de en la habitación de sus hijas-hijos, que instalen antivirus y cortafuegos para impedir el acceso a contenidos de internet que puedan perjudicar tanto al ordenador como a la persona y realicen copias de seguridad. También es fundamental que hagan comprender a los menores que no todo lo que hay en internet es cierto y que hay datos personales y de terceros que no se deben dar a nadie.
– ¿Piensa que sin una buena educación no hay herramienta que valga?
– Es primordial. Nosotros sólo damos herramientas, pero pueden resultar imperfectas, porque los riesgos no sólo están en el ordenador, también en el móvil o en los video juegos. Sin una educación, sería imposible controlar todo eso.
– ¿Cuáles son las principales inquietudes de los padres y madres que acuden al taller?
– Básicamente tres. Les preocupa el messenger y el chat, cómo saber qué hablan sus hijos y con quién. También les inquietan los contenidos inapropiados y quieren aprender a filtrarlos. Por último está la webcam, si no es necesaria, recomendamos desinstalarla, quitarla del alcance del menor.
– ¿En qué consiste el software de control parental?
– Intenta impedir que alguien entre a nuestro ordenador, filtrar los contenidos que nos llegan y vigilar, monitorizar y registrar todo lo que se hace al cabo del día. No estamos invadiendo la intimidad de nuestra hija o hijo, sino protegiéndolo y hay que intentar que lo entiendan.
– ¿Qué herramientas hay para ello?
– Está el filtrado de contenidos inadecuados. Se puede hacer a través de listas blancas (el ordenador sólo puede acceder a las direcciones que figuran en ellas) o listas negras (se impide la entrada a los sitios que la engrosan). También hay filtrados por palabras clave, por ejemplo si ponemos la palabra ‘sexo’, no se podrá ver nada que la contenga.
– ¿Cómo se puede controlar en qué páginas entra nuestro hijo-hija?
– Con mecanismos de monitorización y revisión. Permiten conocer dónde ha andado
y, dependiendo del software instalado, incluso con quién ha hablado, qué ha hablado o grabar todo lo que se ha hecho a través de la webcam.
– Otro mecanismo es limitar el tiempo de navegación.
– Puede limitarse el uso de internet y establecer un horario concreto para andar en él.
– ¿Las madres y padres tienen que saber mucho de informática para llevar a cabo todo esto?
– Al tratarse de cosas tecnológicas, es necesario tener una base. Los menores están más adelantados que nosotros, pero hay que intentar comunicarse con ellos a través de estos medios. Recomendamos que se pongan delante del ordenador con sus hijos y que los menores les enseñen cómo es un chat o un messenger. Aquí, el padre puede hacer un doble ejercicio, mientras aprende por dónde anda su hijo y qué herramientas utiliza para poder controlarlas, puede indicarle los riesgos.
Fuente: diariovasco.com