Pedro Coba Yerpes, coordinador del servicio de atención en adicciones tecnológicas de la Comunidad de Madrid, realizó la ponencia «Adolescentes y videojuegos desde la experiencia del SAAT» en la jornada “Videojuegos en familia: mediación y control parental para el disfrute saludable”, celebrada el pasado 23 de enero de 2024 en el Auditorio de Fundación MAPFRE en Madrid.
Jornada videojuegos en familia. Pedro Coba, “Adolescentes y videojuegos desde la experiencia del SAAT”
El Servicio de Atención a las Adicciones Tecnológicas (SAAT) de la Comunidad de Madrid ha desarrollado un enfoque integral y multidisciplinario para abordar los desafíos que los adolescentes y sus familias enfrentan con respecto al uso de videojuegos y redes sociales. La presentación realizada por Pedro Coba, coordinador del servicio, describe este enfoque, enfatizando tres líneas principales de actuación: prevención y sensibilización, intervención especializada, y formación y divulgación.
En la primera línea, la prevención y sensibilización, el servicio organiza talleres tanto para adolescentes como para sus progenitores. Estos talleres, que se llevan a cabo principalmente de forma online aunque ocasionalmente de manera presencial, tienen como objetivo educar sobre el uso responsable de las nuevas tecnologías. Se tratan temas como los beneficios y riesgos de las aplicaciones y videojuegos, la importancia de establecer normas y límites, y la detección de señales de alerta. Además, se fomenta la disminución de la brecha digital y la promoción de actividades socializadoras tanto online como offline.
La segunda línea, la intervención especializada, se centra en proporcionar apoyo individual, familiar y grupal a adolescentes de 12 a 17 años. Este servicio comenzó en 2018 y se caracteriza por un enfoque personalizado e integral. Las intervenciones se ajustan a cada caso particular y buscan involucrar a la familia en el proceso. El acceso al servicio suele ser a través de derivaciones de profesionales como educadores, médicos o trabajadores sociales, aunque en algunos casos también se atienden demandas directas de familiares.
La tercera línea, formación y divulgación, busca complementar el conocimiento de profesionales de otros sectores como la educación, la salud mental y los servicios sociales. A través de esta línea, se pretende formar y sensibilizar a estos profesionales sobre las problemáticas relacionadas con las tecnologías y la adolescencia, y divulgar las actividades y recursos del servicio.
En cuanto a la prevención de tecnoadicciones y riesgos de carácter sexual en la red, el servicio trabaja en dos vertientes. Por un lado, se enfoca en la prevención de adicciones tecnológicas, abordando temas como el uso responsable de las tecnologías, la necesidad de establecer límites y la promoción de actividades sociales presenciales. Por otro lado, se trabaja en la prevención de riesgos sexuales en redes sociales, educando a los adolescentes sobre la privacidad, el autocuidado en la red y apoyando a los progenitores en el acompañamiento de sus hijos en temas relacionados con el sexting, grooming y extorsión.
La intervención especializada con adolescentes incluye una evaluación inicial detallada que considera el tipo de uso de tecnologías, los riesgos asociados y la situación familiar. Se realiza un trabajo intrapersonal con el adolescente, fomentando la introspección y el desarrollo de habilidades emocionales y sociales. Además, se busca fortalecer la relación entre el adolescente y sus progenitores, promoviendo una comunicación efectiva y estableciendo límites claros.
El proceso de intervención se divide en tres etapas: evaluación, intervención y cierre:
- En la etapa de evaluación, se analizan las derivaciones y se establece un diagnóstico inicial.
- Durante la intervención, se definen metas alcanzables y se trabaja tanto con el adolescente como con la familia para mejorar la dinámica familiar y promover un uso saludable de las tecnologías.
- En la etapa de cierre, se hace un balance de los progresos y se consolidan los aprendizajes, buscando afianzar un ocio saludable tanto individual como familiar.
En resumen, el Servicio de Atención a las Adicciones Tecnológicas (SAAT) proporciona un apoyo integral a adolescentes y sus familias, ayudándoles a enfrentar los desafíos y beneficios del mundo digital. A través de la prevención, la intervención y la formación, el servicio busca promover un uso saludable y equilibrado de las tecnologías, reconociendo tanto sus potencialidades como sus riesgos.
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