Según un estudio dado a conocer por la Universidad de Míchigan, en EE. UU., la práctica del sexting podría ser algo normal entre los que han crecido con Internet y otras tecnologías digitales, y una práctica «saludable» de las relaciones modernas.
El estudio, que es el primero en enfocarse sobre el impacto del sexting en la salud, ha sido efectuado sobre 3.447 mujeres y hombres de entre 18 y 24 años (jóvenes adultos) y ha descartado que en estas edades exista relación del sexting con comportamientos sexuales arriesgados o con problemas psicológicos. Los autores del estudio advierten de que las historias negativas en torno al sexting suelen darse entre adolescentes y preadolescentes, un grupo más joven que el que han analizado en este estudio.
El estudio ha revelado también que casi la mitad de los participantes realizaban sexting, mayoritariamente de tipo recíproco (recibir y también enviar sexting).
Entre los problemas cuya relación con el sexting se pretendía analizar, dentro del contexto del impacto de la tecnología sobre la sexualidad y la salud, figuraban: el sexo sin protección, la depresión, la ansiedad y la baja autoestima.
El estudio ha sido producido conjuntamente por el Laboratorio de Sexualidad y Salud y el Centro de Investigación para la Prevención, ambos parte de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Míchigan, y será publicado próximamente en el Journal of Adolescent Health.
Fuente: Universidad de Míchigan