Mónica de la Fuente, periodista, madre y blogger, fundó en 2011 el portal Madresfera, protagonizó el episodio «Criando en tiempos de Internet». Forma parte de las 25 mujeres expertas destacadas en sus diferentes ámbitos de especialización.

Criando en tiempos de Internet, con Mónica de la Fuente

Criando en tiempos de Internet, con Mónica de la Fuente

Mónica de la Fuente es madre, periodista, bloguera, apasionada de Internet y la fundadora de Madresfera, la plataforma de referencia de crianza en castellano. Además, gestiona Saludesfera (contenidos relacionados con salud) y Saboresfera (contenidos sobre alimentación). También es podcaster en Buenos días, Madresfera, editora y redactora de revistas.

El podcast de PantallasAmigas es un programa sobre educación, ciudadanía y bienestar digital conducido por Begoña Beristain.

Transcripción del episodio

Begoña: Hola, ¿qué tal? Bienvenidos, bienvenidas a este nuevo episodio, educación, ciudadanía y bienestar digital, el podcast de PantallasAmigas. Hoy vamos a hablar de crianza y nada mejor que hacerlo con Mónica de la Fuente, fundadora y CEO de Madresfera. Es periodista, madre de 2 y blogger. Vive conectando puntos, colaborando y aprendiendo. ¿Qué es Madresfera? Hablamos de una plataforma que reúne blogs de todo tipo, ideología y condición, pero con un elemento común, los niños y sus cosas. Además, como los creadores de contenido, están por todas partes, recopilan blogs y podcasts sobre los temas que les gustan, la crianza, los niños, las niñas, la educación, la infancia, la salud infantil, la maternidad, la paternidad, las diferentes formas de entender la vida con criaturas. Podéis conocer y descubrir blogs y podcast en su web, seguir las actualizaciones de tus blogs preferidos en la revista en Twitter y Facebook. Visitar el ranking semanalmente y si tienes un blog, apuntarte y participar en multitud de eventos, tutoriales, promociones y concursos. Además, se puede disfrutar de todos los números de Madresfera magazine. Es una revista digital que amplía el universo de contenidos que se generan en una Comunidad rica y amplia, Mónica de la Fuente acaba de publicar un libro, acaba de publicar “Adiós expectativas, hola realidad” Y la verdad es que nos podemos sentir rápidamente identificadas con este título porque ya nos hacemos una idea de lo que nos puede ir contando cuando decimos lo de “adiós expectativas, hola realidad”, es lo que tenemos por delante. Mónica de la Fuente, ¿qué tal? Bienvenida al podcast de pantallas amigas.

Mónica: Buenos días. Muchas gracias por la invitación y un placer estar aquí para hablar de algo que me apasiona, que es el mundo de la infancia y el mundo digital.

Begoña: Fíjate Mónica, la crianza y sus laberintos, hablar de eso es tu pasión, lo haces desde tu propia experiencia. También los años de crianza son muy complejos. ¿Tú crees que la tecnología ha facilitado o ha complicado un poco más la crianza? Tiene ambos diversos, ¿no?

Mónica: Yo creo que por un lado lo que nos da, también por otro nos lo quita. A mí me ha permitido labrarme una carrera profesional, por lo tanto, siempre estaré eternamente agradecida a este mundo de las pantallas porque es mi forma de vida, a casi toda la gente que conozco es a través del mundo digital y luego se han convertido en personas importantísimas para mí y en mi vida personal, con lo cual que voy a decir. Pero es verdad que a nivel ya como madre y como individual, sí veo, y percibo y soy muy consciente de los peligros y de las dificultades que como padres y como madres vivimos también con las pantallas porque están cambiando cada día, están llenos de retos, de evolución. Cada día hay una actualización nueva, te obligan a estar pendientes y estar constantemente informándote, actualizándote. Porque nuestros hijos están en ese entorno y es normal, porque es igual que estamos nosotros.

Begoña: Claro, claro Mónica, y además es que cuando estás en pleno proceso de crianza tienes tantas cosas en tu cabeza y tantas preocupaciones que lo rápido que avanza la tecnología casi nos hacen sentirnos poco adaptados, ¿no?  o poco capaces de enfrentarnos al mundo de la tecnología y decimos, uff, esto ya se lo enseñarán en la escuela, pero claro, ahí no podemos hacer dejación de esta función, pero es como una cosa que a veces se nos convierte en una carga también y nos desborda.

Mónica: Yo veo muchas familias, padres y madres en mi entorno que se sienten desbordados. La última red social, por ejemplo, ahora ha salido otra. Pues no, no pienso meterme, como que nos enfadamos, nos resistimos a esa novedad y es al final, es algo humano. ¿No? Es decir, no nos gusta, estamos en nuestro entorno, en el que ya nos conocemos, nuestra zona de confort, pero esto ha sido así desde el principio de los tiempos. A nadie le gustaban los cambios, pero hay que adaptarse a ellos y es evolucionar o quedarte atrás y por el bien de nuestros hijos, pues tenemos amigos que hacen el esfuerzo de saber cómo funciona la última red o qué peligros tiene, o estar al tanto de lo que les interesa, por lo menos en nuestros hijos, nos guste o no.

Begoña: Oye, creo que empezaste con Madresfera allá por el año 2011 hasta ahora, hasta el 2022. ¿Cómo ha sido un poco la evolución que has visto tú a nivel tecnológico? ¿Nos hemos empezado a preocupar más? El avance ha sido tan rápido que hemos tenido que ir avanzando a velocidad de vértigo. ¿Qué hemos aprendido, que hemos ganado, qué hemos perdido? ¿Cómo ha sido esa evolución desde el 2011?

Mónica: Uf, increíble. La verdad es que jamás hubiera podido imaginar allá por el 2011. Además, justo ahora en verano que empecé con él, con la idea de Madrid, será que esto llegaría a convertirse en lo que es ahora. Es verdad que ha cambiado mucho cuando nosotros empezamos el blog. Los blogs siempre han estado, siempre iban a desaparecer. Yo empecé la crisis del blog desde el principio, desde que se iniciaron los blogs estaban en crisis. Ya cuando habían empezado, justo nada más empezar ya estaban muriendo y eso lo he vivido desde que empecé Madresfera, cuando ya había 300 blogs. En el ranking, hay alguien que lleva muchos años en la industria infantil, me dijo: ¿No hay más de 300 blogs en Madrid, o sea de crianza? No, hay más, dije yo. Bueno, pues si no hay más, pues ya está, nos quedamos en 300, ahora tenemos casi 5000, fíjate. Es decir, la vida, como dice en el Parque Jurásico, la vida se abre camino y al final todo va evolucionando. Evidentemente los blogs han sufrido y sufren un torpedeo de nuevas redes, de nuevos formatos, los vídeos TikTok. Cambian los hábitos, la gente lee menos, pero lo que sí que sigue habiendo son ganas de comunicar, ganas de contar y ganas de compartir algo que es universal en esto de la crianza y de la educación, que es sentirse desbordados, solo, sola y al final las madres sea en formato post de Instagram, sean formato blog, o sea en formato TikTok, intentan crear su propia comunidad y red, que sigue siendo el propósito de Madresfera de allá por el 2011. Pero es verdad que implica un esfuerzo de cambiar formatos, ver lo que funciona ahora, ver cómo se comunica mejor, y luego también a nivel de contenidos y de intereses, creo que estamos dándonos cuenta quizás de los riesgos que existen con Internet, es decir, hemos compartido todo, lo contamos todo, creamos redes, lo damos todo en Internet y ahora nos estamos dando cuenta de que quizás, no sea tan intenso, tan positivo, a veces compartir tantas cosas sobre todo, especialmente la vida de nuestros hijos.

Begoña: el famoso shareting que lo hacemos porque estamos tan orgullosos y orgullosas de nuestros hijos que queremos mostrárselos al mundo. Sin embargo, pocas veces nos paramos a pensar en los peligros que eso les puede acarrear, ¿no? Y ahí sí que tendríamos que bajar un poco nuestro nivel de orgullo y pensar un poco en su seguridad, ¿no?

Mónica: Totalmente, y yo creo que es una cuestión muy humana y que no hay que fustigarse ni tomárselo como algo, oye que mala persona es esta familia por estar mostrando a sus hijos, no, tomémoslo en seamos conscientes de que no teníamos una noción completa de lo que suponía contar o convertir ese álbum que teníamos en casa de fotos en papel, no sabíamos lo que significaba ponerlo en un formato virtual y lo que para nosotros era muy natural y muy emocionante y muy positivo, que es compartir algo que te gusta, ahora, años después vamos viendo que tiene consecuencias y que quizás deberíamos replantearnos qué enseñamos y que no, por el bien de estas criaturas. Que ojo, el día de mañana, y ya está pasando, van a tomar las riendas de su propia identidad digital, deberían hacerlo, y a lo mejor empiezan a recriminar a sus progenitores el haber sobreexpuesto ciertas facetas, que a lo mejor no son buenas, o no son tan fantásticas como nosotros pensábamos en un principio, pero creo que es un proceso que estamos viviendo como sociedad y que poco a poco vamos entendiendo. Es una cosa que no llega de un día para otro.

Begoña: Sí, y luego fíjate que vemos familias que han convertido la crianza de sus hijos y de sus hijas en su negocio, ¿no? Conozco otra compañera periodista que casi les llama, los jornaleros a esos niños y niñas, porque casi están trabajando desde que son bebés porque son expuestos, mostrados, y me contaban hace muy poquito el caso de una familia norteamericana, todos de raza blanca, guapos, rubios estupendos, tenían 3 hijos y los mostraban continuamente, estaban haciendo negocio con ese exhibir de su vida familiar. Pensaron que les faltaba algo y adoptaron a un niño chino. Supongo que conoces el caso, ¿verdad? Bueno, pues ya por seguir contándoselo a nuestros oyentes, adoptaron a un niño chino, ese niño chino tenía una discapacidad, tenía un problema de autismo. Y entonces dejaron de mostrarle en sus publicaciones, Internet se les echó encima, la gente de Internet sobre todo culpabilizaba a la madre, de que había abandonado a ese niño, este mercantilizar con nuestra vida familiar y sobre todo con la crianza de nuestros hijos y con esa aparición, del término momfluencer, madres que se hacen influencers a través de sus hijos, esto es terrible y esto también hay que hacérselo mirar.

Mónica: Sí, además pues es un poco también relacionado con lo que hablábamos antes. Ha ido llegando de una manera gradual, hemos ido todos partícipes, tanto la audiencia como las marcas, como las agencias, como los propios influencers, los propios usuarios de las redes, todos tenemos nuestra parte de responsabilidad y al final está siguiendo las leyes del mercado, lo que funciona, las marcas quieren vender sus productos, están utilizando ni más ni menos aquello que éticamente o no está funcionando, con lo cual ahora todos antes de rasgarnos las vestiduras, tenemos que tomar parte en esto y decir qué parte de responsabilidad tengo yo. ¿Soy usuario de estos canales? ¿Estoy viendo esto? ¿Qué consumo? Porque es muy fácil también de acusar a esta gente y yo desde luego, no estoy para nada de acuerdo en esa en esos comportamientos, pero seamos todos responsables y pensemos qué hacemos con nuestro tiempo digital. Porque ahí está el melón,

Begoña: Claro, claro, y al final las marcas saben lo que vemos y es ahí donde van a invertir su dinero, ¿no? Y por qué cuando subes una foto a Instagram con un niño y sin un niño los likes que tiene la foto con niño y con niña se disparan, ¿por qué?

Mónica: Pensemos en eso porque ahí hay mucho de fondo y es muy fácil decir, esta gente es muy mala, mira lo que está haciendo ya. Pero es que esta gente tiene millones de usuarios, ¿verdad? O sea, ¿qué está pasando? Es un fenómeno social, no creo que sea una cuestión individual, y además yo estoy metida en esto y trabajo en este mundo y sé que las marcas piden muchas veces eso. Entonces, tenemos que hacérnoslo mirar todos y acabar entre todos con esa mercantilización, como tú bien dices, frías de la vida privada y sobre todo de esta de los niños, que son personas y que tienen derecho a elegir su propia identidad digital el día que puedan hacerlo.

Begoña: ¿Tú crees que hay preocupación en las familias por esto, o más bien al contrario?, es decir oye, pues igual es que al niño le podemos sacar rentabilidad, también a ti se te acercan Mónica, se acercan a Madresfera y plantean este tipo de cuestiones sobre la crianza y el mundo digital.

Mónica: Mucho, sí, sí, claro, y además es que es una vía de ingreso muy fácil y jugosa y hay muchísima gente que ha visto ahí una vía de escape rápida, fácil y accesible, todo el mundo tenemos acceso a Internet o casi todos y es muy sencillo, relativamente, lleva mucho trabajo, pero es relativamente sencillo crear ese tipo de cuentas y por eso hay tantas y están funcionando tanto. O sea que por supuesto hay mucho interés y también a la vez que va creciendo el interés también va creciendo la preocupación afortunadamente. Porque se están haciendo cosas que no se deberían hacer y que yo creo que se deben regular y que debe haber una ley y una regulación mucho más estricta. ¿Para qué? Igual que se regula otros contenidos audiovisuales, en publicidad, en tele, en prensa, en radio, en cine, que se regule el trabajo en redes sociales con los contenidos, las apariciones. ¿Qué productos se pueden hacer, qué contenido y que apariciones con niños o con la infancia se puede hacer? porque al final vamos a llegar a eso.

Begoña: Claro. El mundo de las pantallas la verdad es que nos preocupa especialmente. Dicen los expertos, que, entre 0 y 3 años, nada de pantallas, sin embargo, las usamos como guardería electrónica e incluso hay bebés muy pequeñitos que a los que vamos paseando en sillita y llevamos un adaptador para el móvil para que mientras pasean en vez de ver los árboles y los pajaritos vean una serie de dibujos animados, ¿no? Y esto también preocupa mucho.

Mónica: Sí, sí, la verdad es que yo estudio la evidencia científica que a mí es lo que me intento utilizar siempre para basar nuestras opiniones en la evidencia científica. Nos está avisando, no se tienen que utilizar las pantallas en esas edades, en cuanto menos pantalla es mejor, pero es verdad también que luego hay multitud de situaciones y lo que no tenemos que hacer es fustigarnos y pensar que, porque de repente estoy mirando una pantalla, ya vamos a hacernos adictos, ¿no? Entonces, por supuesto, sentido común, igual que la utilizamos ese sentido común para otro tipo de decisiones yo creo que en las pantallas también. La gente más o menos lo va viendo, lo que pasa, es que claro es un tema muy candente, estamos todos inmersos en ellos y ya, y por supuesto creo que como adultos pues tenemos que ponernos muy firmes y ponerlos a nosotros mismos también esos límites que luego les estamos exigiendo o queremos que se les exija a los niños y por supuesto ser conscientes de la evidencia científica, si nos están diciendo que de 0 a 2 lo suyo es que no haya pantallas, pues es que tiene todo el sentido del mundo, entonces ahí sí que yo creo que además está muy extendido, se dice constantemente, pero bueno, es difícil.

Begoña: Sí, es difícil. Mira, a mí me suele dar bastante pena cuando voy a un restaurante y veo a los niños, a las niñas, que están pegados a la pantalla mientras los adultos comen, ¿no? Porque me parece que en la crianza esos momentos de reunirse para comer, para desayunar, para cenar, son muy importantes, porque en el resto del día estamos muy ocupadas y tenemos muchas cosas que hacer, pero ese momento hay que centrarse en lo que estamos haciendo, que es relacionarnos con nuestros hijos e hijas. Ese momento sí que tiene que ser clave y tiene que ser de pantallas fuera.

Mónica: Claro, lo que pasa es que, como dice mi admirada María Zavala, al final, ¿qué hay detrás de ese tiempo que se está utilizando en la pantalla? Es decir, ¿por qué al final estamos utilizando ese esa pantalla? Le estamos dando esa pantalla, o sea, es decir, nos centramos en la pantalla como el objeto odiado, y lo que tenemos que mirar es el fondo. ¿Qué dinámicas familiares tenemos? ¿Cómo empleamos nuestro tiempo?, que no quiero decir, y con esto que no se me estrese nadie, que tenemos que estar planificando constantemente nuestros minutos familiares, no, pero que tenemos que aburrirnos, que tenemos que tener tiempos de silencios, que no pasa nada porque miramos de repente al infinito que seamos conscientes de que hay detrás de ese tiempo en el que el niño a lo mejor está solo y está utilizando la pantalla porque es lo que tiene más a mano, y que si yo estuviese sola también lo haría. Es decir, que miremos un poco por detrás y veamos qué tiempo tiene el niño solo, qué tiempo está utilizando con adultos, cómo se utiliza ese tiempo, que dinámicas hacemos, qué ocio tiene. Y  veamos luego cómo se aplican ahí las pantallas, que a veces nos falta ese análisis un poco más lento porque lo fácil es ya está en línea con la pantalla, bueno, y que está haciendo el señor, porque a lo mejor lleva 12 horas estudiando o 12 horas con una agenda provechosísima y está media hora con una pantalla y a lo mejor está bien.

Begoña: Mónica, ¿qué es lo que más les preocupa a las familias? El uso de las redes sociales, que utilicen la tableta, por ejemplo, para jugar y que jueguen demasiadas horas, que puedan tener acceso a páginas donde alguien les pueda contactar y que tenga malas consecuencias ese contacto, que vean porno. ¿Qué es lo que más les preocupa a las familias? ¿Qué es lo que te trasladan de esto?

Mónica: Hay mucha preocupación o por lo menos es lo que me llega a mí. Me llegan las familias que tienen un poco más de preocupación sobre este tema. A los que no les interesan ni se acercan a Madresfera o lo que nosotros comentamos. Sobre todo en el tema de la del abuso sexual de los contenidos sexuales, de la pederastia de personajes indeseables, delitos y aquellos contenidos que puedan llegar a convertirse en problemáticos para sus hijos, que les pueda pasar algo. Entonces siempre nos vamos, como al caso más extremo y la gente se asusta y se extrema y se alarma con esos casos. Por ejemplo, leyendo a Pablo Dungeon, un perito informático muy conocido que trabaja sobre estos casos y los divulga en Twitter, y que siempre nos quedamos con, pues el ataque que han sufrido, que han sufrido cyberbullying. Este niño ha tomado esta decisión porque estaba siendo acosado y eso es lo que más preocupa, estos casos, así como más llamativos, pero dejamos de lado, creo, la dinámica diaria de qué contenido ven durante el día, por ejemplo, usan el móvil del padre o de la madre y con sus cuentas un niño menor que se hace mucho y entonces te dicen no, bueno, pero es que estaba usando mi móvil, no está pasando nada claro. Precisamente está usando tu móvil con todo acceso a cuentas adultas, es decir, no somos conscientes realmente de los límites de las edades y de lo que pueden hacer nuestros hijos ahí, yo creo que falta esa percepción completa del proceso.

Begoña: Estamos hablando de muchas cosas que nos pueden resultar un poco como preocupantes, problemáticas. Sin embargo, y en Madresfera, queda absolutamente reflejado. La tecnología, en las nuevas formas de comunicarnos, las redes, Internet, los blogs, los podcasts. Todo esto también está facilitando mucho la crianza, porque está enseñando mucho.

Mónica: Sí, sí, claro, y eso es una de las cosas más positivas que tiene todo esto y nos permite conectar con gente, pues por ejemplo conocer a Pablo Tremont, a María Zavala, a vuestro podcast. Iniciativas contra la violencia infantil, de pediatras que están haciendo en redes una labor de divulgación tan grande como Madresfera. A mí me ayuda tanto, de repente encontrar en redes, gente que divulga y ayuda, pues con cuestiones que te puedan parecer a lo mejor intrascendentes. Pero hoy leía un recordatorio, no se da a los niños menores de 4 años, frutos secos porque ya ha pasado un accidente con un niño y una tragedia, oye, pues muchas veces que es una cosa como muy cotidiana que no caes en ello, pero de repente la gente insiste, qué hacer si hay un atragantamiento, medidas de primeros auxilios. Hay tanto contenido de calidad en Internet y para las familias, que a mí lo que me gusta es que la gente se quedase con filtrarse bien y que fuesen a las fuentes de calidad y que se aprovechase la labor de curación de contenido, que desde muchas cuentas hacemos para que el contenido que leemos no sea el de una cuenta de TikTok random que te está hablando de salud mental, sino de un psiquiatra o un psicólogo o un personal sanitario que te está hablando con una fuente de referencia y que nos quedemos con ese contenido de calidad, que nos ayude a criar a nuestros hijos sin tener a lo mejor que desplazarte a un centro de salud o buscar en persona a ese profesional.

Begoña: Y es muy importante eso que estás diciendo porque todavía quedan familias en las que se considera que las redes sociales son únicamente para los hijos, para las hijas. Bueno, es ahí donde se juntan, donde hablan y no esto que estás diciendo tú es muy importante tener una guía de cuáles son las cuentas a las que seguir, porque sabes que te van a dar esa información de calidad que antes la podías buscar en un libro físico o en una enciclopedia de salud, por ejemplo, y que ahora las tiene en las Redes sociales, por eso siempre tratamos de no demonizar y sobre todo de que la gente adulta se acerque a las redes sociales porque va a conocer el mundo de sus hijos, de cómo se mueven ahí sus hijos y además va a aprender mucho, ¿no? Y bueno, nos decías antes que hay más de 5000 blogs de crianza, y ahí hay mucho contenido de calidad al que seguir.

Mónica: Y con contenidos que pueden parecer tan intrascendentes como, por ejemplo, que hacer en verano, ahora en casa, con los niños. Ahora con la pandemia hemos vivido cómo nos han salvado la vida los blogs de manualidades o de recetas para hacer en casa ese pan casero que hacíamos y recetas para hacer con niños. Hay tanto contenido tan bueno y es como acercarnos a la biblioteca que tienes de confianza tu librero, tu bibliotecario o bibliotecaria. Y le preguntas, oye, estoy buscando un libro sobre esto y sobre tal. Bueno, pues acercaos a las redes a aquellas personas que hay mucha gente que hace ese trabajo y de filtrar, de currar, de recoger gente que lo comunica bien y aprovechar porque es que es un contenido gratuito en muchas ocasiones currado, con evidencia científica, Y todo eso es una cantidad de información que yo creo que no somos conscientes de la de lo valioso que puede llegar a ser y que además nos ayuda a filtrar aquellas desinformación que existe y muchísima, y que tenemos que aprender a diferenciar para ayudar a nuestros hijos a que también sepan diferenciar lo que es una información contrastada de lo que no.

Begoña: Hace poco leía un experto que decía que ya en las escuelas se está empezando a utilizar demasiado la tecnología ¿a ti como te suena esto? Porque yo cuando leí ese titular me pareció que podía llegar a tener razón, que no podemos basarnos solo en relacionarnos a través de lo virtual, que todavía ese sentarnos en un corro y hablar tiene que ser muy importante, ¿no?

Mónica: Claro, lo que pasa es que ahora mismo hablamos en muchas ocasiones desde la opinología, es decir, yo tengo desde mi contexto y desde mi background puedo opinar que se está usando mal la tecnología en la escuela. Pero es que realmente sobre qué me baso, qué estudios, o sea, yo quiero opinar sobre este tema. Cuando me den datos reales de, por ejemplo, hay un equipo de investigación en Valencia, en la Universidad de Valencia, que investiga la diferencia entre leer en tableta y leer el papel. Entonces, a mí eso me parece un trabajo fundamental que hay que hacer, pero que lleva tiempo, esfuerzo, recursos, lectura sosegada, y tiempo, sobre todo tiempo, ver con qué aprendemos mejor, leyendo en pantalla o leyendo un papel una cosa tan simple y tan con un debate tan frío como ese, pero que es fundamental, porque si tenemos claro dónde se le ve mejor o qué se lee mejor o qué se aprende mejor o cómo lo en qué condiciones, Podríamos seguir ese debate de, Oye, está usando bien o se está usando mal. Porque, no podemos caer en él. Antes se enseñaba mejor porque solo se enseñaba en libros, porque todos sabemos que ha habido gente que no ha aprendido nada porque no se ha enseñado bien y ha habido gente que sí y a lo mejor hay que abordar en por cómo se enseña en digital, cómo se enseña en papel y buscar la conjunción de ambas, pero evidentemente basado en estudios, datos, investigaciones y eso requiere mucho tiempo. Es que saberlo ahora es igual que si sabemos que de 0 a 2 no pantallas, pues ya lo sabemos, sigamos avanzando y sigamos viendo, y luego y todo lo demás, pues con cautela, sin dejarnos llevar por el acaloramiento de los debates de, no es que a mí me encanta el papel yo no quiero pantallas digitales. Bueno, pues que a lo mejor lo están haciendo muy bien en ese centro escolar y en el otro el de al lado, no. ¿Y es el problema la pantalla digital?, no, el problema es que no se está haciendo con la metodología, los tiempos o las edades adecuadas.

Begoña: Fíjate, decíamos antes que lleváis desde el año 2011 trabajando en Madresfera, los niños, las niñas del 2011 son muy diferentes a los del 2022 porque como ha avanzado todo tan rápido, y avanza la forma de relacionarnos, de informarnos, de comunicarnos. ¿Ha convertido a los niños, a las niñas, en diferentes a los de hace 10 años, o no?

Mónica: Pues nada, no lo creo, no lo creo, sinceramente, creo que el contexto cambia activamente, pero que a la hora de la verdad, ¿qué necesidades vitales tenemos y tienen nuestros hijos?, las misma. Que una familia esté con ellos, la presencia de sus padres y de sus madres, el tiempo que pasamos con ellos y cómo lo empleamos, como los tratamos, el trato a la infancia. Sigue siendo necesario un buen trato ahora, igual que era hace 11 años. De la misma manera. ¿Que el contexto ha cambiado? Pues muchísimo, pero sinceramente, yo creo que hay cuestiones universales que siguen estando de la misma manera, de antes y están ahora. Efectivamente cambia todo mucho y el contexto también, y ahí tenemos que adaptarnos a él, pero para mí el buen trato sigue siendo la prioridad.

Begoña: Esa es la clave, buen trato en el mundo real, en el mundo virtual y en todos los mundos. Hacíamos, al arrancar esta charla una radiografía rápida de lo que es Madresfera, pero queremos que Mónica sea también quien nos presente a su criatura, porque ella es madre de 2, pero también Madresfera es su criatura.

Mónica: Bueno, pues Madresfera al final se ha convertido en un punto de encuentro de empresas, de anunciantes, de gente que comunica, de comunicadores desde diferentes entidades, de diferentes redes, con todo lo abarcable dentro de la infancia y todo lo que nos interesa con ese buen trato, con esa preocupación por el bienestar de la infancia en el centro, ¿no? Y luego ya desde ahí pues podemos hacer de todo y comunicar de todo, desde el podcast, desde las redes, desde los blogs, y eso es Madresfera y ahí estamos evolucionando también con los tiempos, viendo qué es lo que hace falta, hacia dónde podemos ir y qué necesidades son las que se pueden ir cubriendo dentro de la de nuestra audiencia, y qué quieren saber los padres y las madres hoy en día.

Begoña: ¿Y qué quieren saber? así en 2 titulares.

Mónica: Pues yo creo que una de las principales preocupaciones es como sacar más tiempo para pasarlo con los niños y cómo aprovechar bien ese tiempo. Tenemos muy poco tiempo o pensamos que tenemos muy poco tiempo, por lo que yo creo que el tiempo es la clave.

Begoña: Sí, sí. Fíjate, ahora que se habla tanto de esa famosa gran división de gente que deja su trabajo. Incluso ayer veía que dejar el trabajo es casi una de las nuevas modas, porque queremos tener más tiempo para nosotros y queremos trabajar de otra manera. Todo eso al final se reduce a que lo que queremos es tener tiempo, para dedicarnos solo a nosotros mismos y desde luego también a nuestros hijos y nuestras hijas, porque sabemos que, con ese tiempo, cuando ese tiempo es de calidad la educación siempre es mucho más positiva, ¿no?

Mónica: Si aprovechar el tiempo e incluso para aburrirte, pero tu tiempo y utilizarlo tú con tus hijos, con tu familia de la manera que tu consideras oportuno o mejor y disfrutarlo plenamente pero que no nos lo roben porque tenemos muchos ladrones de tiempo en nuestro entorno, incluso el trabajo, que le dedicamos una jornada alocada y totalmente sin raciocinio absoluto. Y entonces, recuperar ese tiempo para dedicarlo a nuestros hijos qué son los que necesitan tiempo

Begoña: Auguras que dentro de poco tiempo lo digital no va a ser una preocupación porque ya estará tan absolutamente interiorizado que ya dejaremos de decir es que las redes son peligrosas y tendremos que estar lanzando un mensaje de que, bueno, tienen sus riesgos, pero desde luego tienen también muchas bondades. ¿Habrá un momento en el que dejemos de lanzar este mensaje?

Mónica: No lo creo. Porque viene el metaverso. No creo que vivamos en ese momento en el que estemos tan inmersos en ello que ni lo veamos, y además debería ser así siempre, es decir, siempre debemos tener esa visión crítica, y estar en alerta de lo que viene y para buscar los posibles riesgos, yo creo que eso es súper necesario y no va a llegar ese día, creo yo, al menos no creo que lo vea, en el cual dejemos de mirar así y levantar las cejas.

Begoña: Ahora que has citado el metaverso no me imagino yo cómo va a ser la crianza en el metaverso, pero tampoco nos imaginábamos cómo iba a ser eso de poder charlar al instante con una persona que estuviese en la otra parte del mundo y viéndole a la misma vez. Fíjate, llegará el metaverso y lo interiorizamos, como hemos interiorizado otras muchas cosas, ¿no?

Mónica: Saldrán libros y discutiremos sobre ello y se hablará. Será el tema recurrente y vendrá otro. Y bueno, pues es la es la vida, ha sido así siempre y seguirá siendo, O sea, los avances siempre traen este tipo de preocupaciones y bien porque eso quiere decir que intentamos llevarlo de la mejor manera posible y que no nos atropellen.

Begoña: Sí, oye Mónica, antes de despedirnos. Preséntanos “Adiós expectativas, hola realidad.” Es un titulazo.

Mónica: Por favor, que voy a decir de mi criatura pequeñita, recién nacida, sobre todo que es un libro sobre crianza, embarazo y maternidad y con mucho humor, mucho, mucho humor. He intentado reflejar mis propias experiencias y mis propias reflexiones sobre este mundo de estos 11 años que llevo viviendo en Madresfera y 13 como madre y que no es un libro, ni es una guía de maternidad, ni es una guía de consejos, porque de eso hay mucha que ya está muy escrito y hay un montón de gente maravillosa que lo hace, sin referencia muchísima gente experta para que la gente le pueda, los lectores lo puedan consultar. Pero sobre todo es una invitación a pasarlo bien, a reírse, a desdramatizar la maternidad, que yo creo que ya se está haciendo, pero que desde mi punto de vista se puede ir reflexionando sobre ciertas cosas y a abrazar el caos que es la reflexión ahí que está de fondo y a entender que la maternidad, como todo en esta vida, tiene sus luces y sus sombras. Y que hay que intentar abrazarlo todo e intentar sacarle lo positivo a todo lo que vivimos porque es una etapa muy bonita, muy intensa, pero que se tiene que disfrutar para poder pasarla de la mejor manera posible.

Begoña: Ahí queda la recomendación. Nuevo libro de Mónica de la Fuente, Adiós expectativas, hola realidad. Mónica de la Fuente es fundadora y CEO de Madresfera. Ella, como decíamos al principio, vive conectando puntos, colaborando y aprendiendo. Hemos aprendido mucho con ella y se puede aprender muchísimo en Madresfera. Así que os recomendamos que le echéis un vistazo, porque seguro que os vais a quedar. Mónica de la Fuente, muchísimas gracias por haber estado en este nuevo episodio de educación, ciudadanía y bienestar digital, el podcast de PantallasAmigas. Muchísimas gracias.

Mónica: Muchas gracias a vosotros por invitarme y un placer estar aquí charlando sobre este tema. Gracias.

Begoña: Un abrazo.

Educación, ciudadanía y bienestar digital, un podcast de PantallasAmigas presentado por Begoña Beristain.



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